¿Alguna vez has estado en una ceremonia del cacao? Si no lo has hecho, ¡deberías apuntarlo en tu lista de cosas por hacer! Es una experiencia que no olvidarás en toda tu vida y sentirás la necesidad de repetirla una y otra vez. Con todos los reveses que nos da la vida, a veces cuesta valorar todas las cosas buenas que tenemos. Por eso, si te encuentras atrapado y no sabes por dónde seguir, ¡una ceremonia del cacao que te despeje la mente puede ser justo que necesitas!
¿Qué es exactamente una ceremonia del cacao?
En resumidas cuentas, una ceremonia del cacao celebra los sagrados poderes sanadores del cacao. Te permite volver a conectar contigo mismo y con los demás, y favorece la curación, la creatividad, la conciencia plena y la alegría, además de estimular el positivismo.
En algunas ceremonias, las personas se colocan en círculo, toman cacao y meditan juntas. Otras ceremonias pueden ser más animadas e incluir bailes, ejercicios de respiración o algún otro ritual para relajarse e invocar al espíritu del cacao.
No obstante, por lo general las ceremonias del cacao son el viaje de una persona hacia la claridad y la iluminación para entender mejor cómo desenvolverse en el mundo que las rodea.
La gente que ha asistido a estas ceremonias da fe del poder del cacao. Muchos aseguran que los ha ayudado a abrir los ojos y a valorar las cosas que tienen en la vida. Para las personas que estaban pasando por un momento difícil, el cacao fue esencial para recuperarse. Les dio la concentración y la motivación necesarias para atreverse a tomar medidas y asumir el control de su destino.
¿De qué época viene esta ceremonia?
Los antiguos olmecas, mayas, aztecas y otras culturas mesoamericanas de Latinoamérica consideraban que el cacao era sagrado. El árbol, las vainas y los granos eran muy valorados y codiciados por estas antiguas civilizaciones. ¿Y quién puede culparlos? El cacao era EL superalimento de la época, mucho antes de que existiera el concepto de superalimentos.
Siglos antes de que los europeos pusieran las manos en el cacao y lo convirtieran en el chocolate dulce que conocemos hoy en día, los antiguos mesoamericanos usaban el cacao para varios rituales y ceremonias.
El cacao se consideraba un alimento para los dioses y estaba reservado para las élites y para las clases dirigentes de la sociedad. Era tan valioso que incluso lo utilizaban como moneda para hacer trueques y negociar entre sí. Por eso los españoles decían que el cacao eran «semillas de oro».
Dicho esto, se dice que la ceremonia del cacao actual es diferente a la que hacían los antiguos mayas. No ha llegado ningún «manual de la ceremonia del cacao» a nuestra época, si es que alguna vez se escribió uno. Y no pasa nada, porque las ceremonias del cacao no tienen que ver con el pasado: de lo que tratan es de aportar claridad, introspección y amor a tu vida para que puedas seguir adelante ¡y vivir la vida con gusto!
¿El cacao es lo mismo que la cocoa?
La cocoa NO es lo mismo que el cacao, aunque los dos surgieron de las semillas del mismo árbol, el Theobroma cacao. En griego, Theobroma literalmente significa «alimento de dioses». Una vez que vivas tu primera ceremonia del cacao, comprenderás por qué se llama así.
Cacao
El cacao crudo es la forma más pura del chocolate, ligeramente tostado y molido del grano. Es muy rico en nutrientes como el hierro, la proteína, la fibra, el magnesio y el potasio, entre otros. Este es el auténtico superalimento del chocolate, y no la cocoa.
Imagina el cacao como la forma original del chocolate que tanto gustaba a los mayas y aztecas. Es amargo y no se parece en nada al sabor que imaginas que tiene, especialmente si creciste comiendo barritas de chocolate con leche azucaradas. El cacao de verdad es espeso, rico y… ¿amargo lo hemos dicho ya? ¡Es justo lo contrario a tus dulces de chocolate favoritos!
Está claro que te llevará un tiempo acostumbrarte al sabor, pero, cuando pruebes el cacao puro en una auténtica ceremonia, comprenderás por qué a los antiguos mesoamericanos les gustaba tanto.
Cocoa
La cocoa, por otro lado, es la versión adulterada del cacao. Se procesa mucho y se tuesta a temperaturas muy altas antes de molerla y hacerla polvo. Durante este proceso, a la cocoa se le quita la grasa (de la manteca de cocoa). Pierde el sabor amargo, pero también gran parte de su valor nutricional.
En lo que respecta al sabor, creo que la mayoría de la gente afirmará que la cocoa sabe mucho mejor que el cacao, pero la comparación no es nada justa. La mayoría de las marcas de chocolate que se venden hoy en día solo contienen un 20-30% de cocoa. El resto es azúcar, leche, conservantes y otros ingredientes.
Si alguno se pregunta si se puede usar cocoa en una ceremonia del cacao, la respuesta, evidentemente, es que no.
¿Se puede usar polvo de cacao comercial en una ceremonia del cacao?
El polvo del cacao que ves en el supermercado sigue siendo más sano que el polvo de cocoa, pero NO es de la misma calidad que el cacao de las ceremonias. Al polvo de cacao comercial se le quita la grasa natural de la manteca de cacao, por lo que no vivirás la misma experiencia que con el cacao de las ceremonias (te hablamos de ello más adelante).
¿El cacao tiene poderes curativos? ¿Qué beneficios aporta?
Si es la primera vez que oyes hablar de la ceremonia del cacao, probablemente te estés preguntando: «¿POR QUÉ EL CACAO? ¿Qué tiene que sea tan especial?».
Pues bien, el cacao no solo es una bebida sana y nutritiva. Aquí tienes una breve lista de sus propiedades más importantes, que realmente lo convierten en un potente superalimento. ¡No nos extraña que lleve milenios siendo tan popular!
Teobromina
Este ingrediente psicoactivo es un potente estimulante. Es similar a la cafeína, pero no hará que te sientas inquieto y nervioso. En cambio, la teobromina estimula el sistema cardiovascular y hace que te sientas bien y eufórico, especialmente si se toma en las dosis altas de las ceremonias (unos 40 gramos de cacao puro).
Cuando la teobromina haga efecto, te sentirás vivo, consciente y conectado con el mundo. Te abre las puertas de una experiencia inigualable y eso es lo que realmente hace que una ceremonia del cacao sea especial.
Anandamida
Se la conoce como el «químico de la felicidad» porque despierta una sensación de alegría y serenidad. Durante la ceremonia, te sentirás en paz contigo mismo. En ese momento, dejarás de ser tan duro contigo, y aprenderás a perdonarte y a aceptarte tal y como eres.
Serotonina
Sí, el cacao contiene serotonina, es decir, el químico de la felicidad del cuerpo. Ayuda a estabilizar el estado de ánimo y nos aporta una sensación de felicidad. Además, el cacao estimula el cuerpo para que produzca más hormonas que nos hacen sentir bien, ¡así que las emociones positivas serán las grandes protagonistas durante las ceremonias del cacao!
Antioxidantes
El cacao (no la cocoa) es rico en flavonoides y tiene un contenido de antioxidantes extremadamente alto. Los antioxidantes combaten los radicales libres y revierten el daño que estos átomos inestables le provocan al cuerpo. Las investigaciones han demostrado que el chocolate crudo o cacao tiene potentes propiedades antienvejecimiento y puede reducir la presión sanguínea ¡e incluso mejorar la salud cardíaca en general!
Magnesio
Un montón de alimentos contienen este importante nutriente, pero el cacao crudo los supera a todos. ¡Cien gramos de cacao te darán 507 mg de magnesio! Sin embargo, la triste realidad es que la mayoría de las personas tienen falta de magnesio.
Si no obtienes una cantidad suficiente del cacao y de tu dieta, puedes barajar la opción de tomar nuestro complejo de magnesio MagEnhance. Contiene 3 tipos distintos de magnesio: treonato de magnesio, glicinato de magnesio y taurato de magnesio.
Hierro
El cacao es la fuente más rica de hierro vegetal (hierro no hemo) del mundo. ¡Obtienes 7,3 mg de hierro por cada 100 gramos de cacao!
Cinc
El cinc es esencial para nuestro sistema inmunitario. Cuanto más tomes, más capaz será tu sistema inmunitario de combatir a los invasores y de proteger tu cuerpo de las enfermedades.
Calcio
¡100 gramos de cacao tienen más calcio que 100 mililitros de leche de vaca!
¿Cómo se hace una ceremonia del cacao?
No hay una regla absoluta para hacer una ceremonia del cacao. Puedes unirte a un grupo dirigido con un facilitador o un guía espiritual, o puedes hacerlo por tu cuenta o con un compañero. Puedes hacerlo al aire libre o en una habitación con iluminación tenue y con algo de música de fondo. Pero hay algunos elementos en común que conectan estos estilos, rituales y tradiciones diferentes y que dan forma a una auténtica ceremonia del cacao.
1) Prepara el cacao de la ceremonia
Para aprovechar todo el poder de la teobromina del cacao, necesitas usar cacao orgánico especial para las ceremonias. Es la forma más pura del cacao con todo el sabor, la grasa y los nutrientes intactos. La textura es extremadamente rica y chocolateada.
A la hora de elegir qué cacao usar para la ceremonia, es importante conocer su historia. Pregunta de qué granja procede, qué personas trabajan y viven allí, y su relación con el cacao. Si quieres, también puedes comprobar si es de comercio justo y si ha sido bendecido por un chamán para vivir una experiencia más auténtica.
Además, el cacao de las ceremonias viene en distintos sabores, texturas y notas. Al igual que existen distintas variedades de granos de café, también hay distintos tipos de granos de cacao. ¡Anímate a experimentar hasta que encuentres la marca perfecta para ti!
¿Cuál es la dosis de las ceremonias?
El cacao de las ceremonias es extremadamente rico y espeso, y tiene una cantidad concentrada de nutrientes y fitoquímicos.
La dosis recomendada es de 42 gramos de pasta de cacao rallada (alrededor de ¼ de taza). Pero si es la primera vez que vas a hacer una ceremonia, tal vez quieras empezar con la mitad de esa cantidad y ver cómo te sientes. No superes la dosis recomendada, ya que podrías experimentar náuseas, dolores de cabeza e incluso palpitaciones cardíacas.
¿Cuándo hace efecto?
Dependiendo de la dosis, puedes tardar hasta 30 minutos en notar los efectos del cacao para ceremonias. Desaparecerán en 2-4 horas.
2) Crea un espacio intencional
Esta es la segunda clave de una ceremonia del cacao adecuada. Puedes tomar el cacao para ceremonias más potente, pero si no creas un espacio intencional sagrado, probablemente la experiencia no te aportará nada.
En una ceremonia grupal, el facilitador pedirá a los participantes que digan su nombre y que cuenten qué les ha llevado a la ceremonia. Les preguntará qué están buscando en sus vidas o en qué necesitan más claridad. Eso es lo que se conoce como «establecer la intención» en una ceremonia del cacao.
También es posible que el facilitador establezca la intención para todo el grupo. Este aspecto puede variar, pero esperamos que te hayas hecho una idea de qué significa establecer la intención adecuada.
3) ¡Deja que el cacao haga su magia!
El siguiente paso es conseguir que la gente se relaje. Los métodos que se utilizan varían de un facilitador o chamán a otro, pero la mayoría de la gente canta o baila, o comparte sus intenciones y sus reflexiones interiores.
En este momento, los poderes curativos del cacao surtirán efecto y empezarás a abrirte a ti mismo y a los demás. La claridad se irá abriendo paso y permitirá que dejes atrás los traumas del pasado y las energías negativas que te rodean. Aprenderás a estar agradecido por lo que tienes, a tener en cuenta a los demás y a estar en paz contigo mismo.
¿Cómo hacer una ceremonia del cacao personal en casa?
Puedes celebrar tu propia ceremonia del cacao en casa, ya sea solo o para amigos que quieran experimentar la magia del cacao puro.
Aunque existen infinidad de maneras distintas de hacer la ceremonia, la mayoría de la gente hace meditación, lleva un diario personal, da un paseo por la naturaleza o la playa, practica meditación con la luna nueva, etc.
¿Quién debería participar en una ceremonia del cacao y quién no?
PARTICIPA si quieres…
- Aprender más sobre el cacao y sus poderes curativos.
- Conocer a personas afines de tu comunidad.
- Curar traumas del pasado.
- Alcanzar la paz interior.
NO participes si…
- Estás buscando una curación terapéutica personal y privada.
- Sufres algún problema cardíaco grave, tomas antidepresivos o tomas medicación para la hipertensión. El cacao es un vasodilatador, lo que significa que reduce la presión sanguínea, por lo que será mejor que barajes otras formas de meditación. ¡A lo mejor podrías probar con el yoga de la risa!
Conclusión
Una ceremonia del cacao no tiene por qué ser la mejor opción para todo el mundo, pero si crees que te vendría bien tener más claridad y paz en tu vida, pruébalo. En realidad, no tienes nada que perder ¡y podrías ganar mucho! Si ya has participado en una ceremonia alguna vez, ¿por qué no nos lo cuentas en la sección de comentarios que aparece más abajo? ¡Nos encantaría conocer tu experiencia!
